La metáfora de la danza en la poesía de Ángela Hurtado

Comparto mi lectura del libro de la escritora Ángela Hurtado, a quien he tenido la gracia de conocer este abril del 2024, en la Feria del libro de Granada, en el espacio que ella misma organizó junto a Asteria Reyes, también boliviana, ambas residentes en España. 

Ángela Hurtado es una poeta boliviana contemporánea que ha sabido ganarse un espacio en el panorama de la gestión cultural literaria, por su responsabilidad en los compromisos que gestiona en las ferias de libro de distintas ciudades de Europa y en la organización de presentaciones de libros de autores bolivianos. Además, Ángela es una de las principales organizadoras de los encuentros de escritores bolivianos en Europa.

Así mismo es destacable su sensibilidad y habilidad para evocar emociones profundas a través de sus poemas, se deja ver en su libro, “Te recordaré bailando”, publicado en España, el año 2015 por Aliar Ediciones. Este libro es una obra significativa con la que abre su camino literario, explora temas de amor, pérdida, y memoria con un estilo evocador. Actualmente, Ángela reside en Granada (España) donde continúa perfeccionando y aprendiendo en el camino que ha elegido: la cultura y la literatura. 

En su libro “Te recordaré bailando”, utiliza la danza como una metáfora poderosa para la vida y el recuerdo. A lo largo del poemario, la autora pinta imágenes vívidas de momentos compartidos, dejando al lector sentir el latido de la música y el movimiento de los cuerpos en un baile que se convierte en un símbolo de conexión y trascendencia, estos cuerpos son los recuerdos y la palabra labrada. Este enfoque recuerda las palabras de Oscar Wilde: “Para escribir hacen falta dos cosas: tener algo que decir y decirlo”, y Ángela Hurtado, sin duda, tiene mucho que decir sobre el amor, la ausencia y la permanencia del recuerdo.

La poesía de Ángela se caracteriza por una mezcla de melancolía y celebración, con un tono que oscila entre la nostalgia y la esperanza. Sus palabras suelen ser cuidadas desde la sencillez, lo cual da profundidad a su lírica, invitan a la reflexión de la infancia, la juventud, la vida con los padres, madres, familia. Como decía el poeta Rainer Maria Rilke, “La verdadera patria del hombre es su infancia”; Ángela rescata la memoria y los sentimientos del pasado, evocando la infancia y los vínculos familiares, lo cual hace que su poesía resuene con cualquier lector que haya experimentado la fuerza de los vínculos familiares y la fraternidad de los amigos.

El título mismo, “Te recordaré bailando”, sugiere una resistencia a olvidar y una promesa de mantener vivos los recuerdos a través del movimiento, de la vida misma. Esta idea se alinea con las palabras de Gabriel García Márquez: “La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda y cómo la recuerda para contarla”. Hurtado, al igual que García Márquez, entiende que la memoria es un acto creativo y un refugio frente al paso del tiempo, y que la memoria se mueve, mueve la vida, la transforma.

Los poemas de este libro tratan a menudo de mantener viva la memoria de seres queridos o de momentos significativos, sugiriendo que el acto de recordar es una forma de rendir homenaje y de encontrar consuelo en medio de la ausencia. Al abordar el duelo y el amor fraterno, Hurtado sigue los pasos de escritores como Pablo Neruda, quien escribió en sus memorias: “Es tan corto el amor y tan largo el olvido”. Hurtado navega por este territorio emocional, ofreciendo a sus lectores un reflejo de su propio dolor y consuelo a través de sus versos. “Te recordaré bailando” de Ángela Hurtado es una obra poética que invita a los lectores a reflexionar sobre los vínculos humanos, el paso del tiempo, y la capacidad de la memoria para mantenernos conectados con lo que amamos.